Una brecha en las murallas que protegen la vida
Cosme Beccar Varela LBM #134 11/4/2001 Holanda acaba de aprobar una ley llamada "Prueba de terminación de la vida y ayuda al suicidio". Esta ley permite a los médicos matar a los enfermos que padezcan "sufrimientos insoportables", no tengan ninguna esperanza de vida y deseen efectivamente morir. El paciente podrá manifestar su voluntad de que lo maten antes de encontrarse en la situación descripta arriba. En el momento de internarse en un hospital, por ejemplo, en previsión de que entrando en un estado de inconsciencia, por demencia, por caer en coma u otra causa, no pueda expresar su voluntad en adelante. Los menores de edad, a partir de los 16 años podrán optar por ser muertos, aún contra la voluntad de sus padres. Los niños de 12 a 15 años, necesitarán el consentimiento de sus padres. Una multitud de holandeses se dió cita frente al Parlamento para protestar por lo que en esos momentos estaba aprobando el Senado. Bien por esos valientes. La Cámara baja...